El Entramado I: El descanso del viajero

Con este dibujo inicio una serie de ilustraciones que he decidido hacer. La idea es plantear, a través de ellas, un lugar inventado, amplio y fantástico, por el que se aventuran viajeros en constante periplo. Cada nueva ilustración irá creando y ampliando este "macroespacio", aportando nuevos matices, historias, lugares y elementos a este mundo, y todas estarán relacionadas entre sí, ya sea a través de detalles, personajes o cualquier otro recurso, modelando este mundo a base de dibujos.

La figura del viajero, precavido, austero, con todos sus utensilios -pocos pero preciados- a cuestas, me parece atractiva, adaptándose éste a diversos terrenos en maravilloso viaje. Además, creo que este tema es idóneo para poder representar diferentes ambientes, situaciones, personajes, estructuras, etc... con las posibilidades a la hora de experimentar con perspectivas, composiciones u otro aspecto técnico que esto permite.

No sé el número que haré de ilustraciones. Estará completo con el número que tenga, y cada una será una oportunidad de volver a este lugar y conocerlo mejor. Puede que la técnica varíe o evolucione a lo largo de este proyecto; ni me propongo eso ni lo contrario. Tan sólo crear dibujando lo que desee y necesite transmitir, describiéndolo de la forma más certera posible; materializar de alguna forma los lugares fantásticos que se me ocurran, dándoles un sentido común. Viajar por ellos, hacerlos reales.

He decidido acompañar cada imagen con un texto, con el fin de ambientar un poco la escena, pero sin describir ni explicar mucho más de lo que lo haga la propia imagen. Básicamente, porque me gusta escribir, y veo una buena ocasión para hacerlo.

Atenderé a posibles ideas que puedan suscitarme lo que vaya dibujando y escribiendo, inspirándome en todo ello para enriquecer futuras aportaciones. Dejaré que las relaciones entre ilustraciones vayan sugiriéndome nuevas ideas para moverme a través de este mundo y e ir dándole forma, permitiendo así que la creación de éste vaya fluyendo también un poco por sí misma.

EL ENTRAMADO: I

El Descanso del Viajero

A veces, aunque el sendero parezca expedito y libre de peligros, 

conviene al viajero prudente hacer un alto donde buenamente pueda, 

en vez de afrontar el camino en circunstancias que pudieran tornarse 

más adversas de lo que en un primer momento se previera. 

Cae la noche, cae la niebla, y el aventurero ha encontrado un lugar que, 

aunque estrecho, parece lo suficientemente elevado como para ofrecer 

cierta seguridad y control sobre el terreno circundante.